La estadística, a grandes rasgos, se ocupa de recoger información sobre alguna característica de la población, organizarla y resumirla, normalmente, en forma de gráficas. De estas se infieren datos, que son útiles para conocer la realidad, los fenómenos y las tendencias en el tiempo. De esta manera, se pueden tomar decisiones más adaptadas a un problema o reto concreto. Por tanto, una buena gráfica es esencial para sacar buenas conclusiones. Para ver en la práctica, cómo se puede resumir la información que se puede inferir de ella, se ha seleccionado un gráfico, creado por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Se trata de una gráfica de tipo barras o columnas. Estas gráficas sirven para comprender los datos entre diferentes segmentos, en este caso entre periodos de tiempo.
El eje horizontal muestra un periodo de 10 años segmentado en años. El eje vertical, muestra la cantidad de emisión de gases de efecto invernadero en millones de toneladas de Dióxido de Carbono equivalente (CO2e) generadas por la actividad (económica y no económica) en España. Los distintos gases [Dióxido de Carbono (CO2), el Metano (CH4) y el Óxido Nitroso (N2O)] han sido convertidos a su valor de dióxido de carbono equivalente, multiplicando la masa del gas por su potencial de calentamiento global.
La función de una buena gráfica es comunicar un mensaje de una manera efectiva y estas se pueden hacer por distintas razones, sea para presentar grandes cantidades de información de una manera compacta y visible, sea para revelar datos observando las relaciones de causa y efecto…etc. En este caso, se pretende mostrar la evolución de un parámetro en el tiempo, la emisión total de gases de efecto invernadero en un año. Dicho esto, se puede ver a simple vista, que la tendencia de las emisiones de gases de efecto invernadero ha sido negativa, ha bajado en 10 años; de 2017 a 2018, ha disminuido en un 2,3%.
Sabemos que estos gases son causantes de la aceleración del cambio climático y por tanto, que hayan bajado es positivo. No obstante, solo con esta gráfica no se revelan las razones de la bajada, se necesitan datos complementarios para sacar conclusiones (más estadísticas y el uso de la probabilidad).
Además, una gráfica, por si sola, no suele revelar un mensaje completo; para entender una gráfica se debe entender en el contexto donde se ha creado y además, ser conscientes de quién o cómo se han tomado los datos. La toma de datos se ha realizado a partir de los Inventarios Nacionales de Emisiones a la Atmósfera, por el Ministerio para la Transición Ecológica, que ha utilizado la metodología IPCC y EMEP/EEA.
Vemos que la tendencia es de bajada, pero no muy pronunciada. Es una buena noticia, pero también se debe entender qué implica emitir la cantidad de 340,7 de millones de toneladas de gases de efecto invernadero a la atmósfera en un año. Aunque haya bajado, se sigue emitiendo, aproximadamente, el doble de gases de efecto invernadero de lo que lo hacen los ciclos naturales.
Para entender mejor la bajada de las emisiones, habría que saber en qué sectores económicos y no económicos lo han hecho y en qué porcentajes.
De todas maneras, es un gráfico que cumple su función principal: mostrarnos que las emisiones han disminuido en España. No obstante, tal y como hemos señalado, para una mejor interpretación y comprensión de esta gráfica, serían necesarios más datos: s el contexto, más gráficas, comparaciones con otros países y las conclusiones de los expertos en el cambio climático y la generación antropogénica de los gases.
Link a la gráfica: https://www.ine.es/dyngs/INEbase/es/operacion.htm?c=Estadistica_C&cid=1254736176941&menu=ultiDatos&idp=1254735976603
Gramática de las gráficas. Pistas para mejorar las representaciones de datos. Joaquín Sevilla Moróder.
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